Seguridad
Para que los trabajos de tala sucedan con la máxima seguridad se debe de tener estudiado hasta el más mínimo detalle.
En primer lugar debemos observar y analizar los posibles obstáculos que se presenten en el momento de la tala. Debemos de tener en cuenta donde vamos a colocar el camión grúa por si hay alrededor edificios, carreteras, tendidos eléctricos, parcelas etc.
Además, si nos encontramos cerca de cualquier camino, carretera o zona de tránsito debemos señalizar debidamente las tareas que vamos a realizar.
La distancia de seguridad para indicar el derribo de un árbol es de como mínimo el doble de la altura de éste. Por ello nos debemos de asegurar de que no haya nadie en ese perímetro de seguridad cuando se produzca el derribo.
Otro elemento a tener en cuenta es el tiempo más concretamente la incidencia del viento. También debemos explorar cual es el estado del árbol porque si sufre algún daño su tratamiento debe de ser distinto.
Por comodidad se recomienda hacer caer el árbol hacia su lado natural. En caso contrario la tarea podría complicarse e incluso requerir de la ayuda de herramientas especializadas.
Preparación del árbol
Se debe de preparar el árbol y sus alrededores para que no suceda ningún imprevisto. Y en caso contrario que este no sea muy grave.
Además se debe de limpiar la zona de matorrales y maleza en general para no encontrarnos impedimentos durante el desarrollo de la actividad. También es necesario despejar una zona de unos 45 metros cuadrados por detrás del árbol.
Otra tarea importante es la operación preliminar de poda en la cual se eliminan del tronco aquellas ramas bajas que podrían estorbar durante el trabajo.
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